27/5/14
De 6 en 6
Estimados visitantes, prácticamente tardo 6 meses en incluir una nueva entrada, os aseguro que la coincidencia deja de parecer puramente matemática. Ese número se ha vuelto este año bastante significativo por motivos desconocidos. La musa no está por aquí, sin embargo la inspiración ha entrado esta noche por mi ventana. No en un sentido metafórico. Más bien lo que he inspirado ha sido el propio aire del cambio que se abría paso entre la terraza y el pasillo hacia la cama. Un leve olor a verano, ya lo conocéis , me ha separado un poco entre la obligación de ir a la cama y el disfrute de seguir percibiendo ese aire a través de la ventana de mi dormitorio.
Ese momento de irse a la cama con rictus de niño castigado que entre berrinches murmurados emprende caminó cabizbajo hacia el catre, todo ello por que sabe lo que le esperará mañana. El Niño , en este caso, niña, sabe que en lugar de una clase llena de colorines lo que hay es trabajo duro, un sinfín de llamadas telefónicas, de noticias inciertas, de subidas y caídas tipo montaña rusa, pero sin adrenalina, en definitiva, carente de atractivo.
Hay un par de cosas que me gustan de mi trabajo, pero me planteo si necesito algo más y ante la duda he aprendido que la respuesta es si.
En qué se ha convertido, el medio de que fin... Por qué aquí, de este modo y no en otro lugar.
Soy víctima de mi propia disconformidad , de mi propia ambición, y de mi maldita filosofía, de la propia rebeldía sobre mi que constantemente me hace preguntarme que me impide seguir avanzando
Cambio de ideario, constantemente me hago preguntas, continuamente busco aquello que no ha llegado. Hasta hoy.
Y hoy, he decidido dejar de buscar incansable y en contra de cualquier recomendación o pronostico, dejar que aquello que haya de venir venga sin esperarlo, ni intentar provocarlo ni un poquito.
Y sobre todo .. Estoy hasta los mismísimos c****es de filosofar, que forma tan infructuosa de perder el valioso tiempo de uno que preguntándose a donde quiere ir, que quiere hacer, o por qué. Que cuento chino, que error tan recurrente. Sobre todo, cuando uno tiene claro que con pensar en hoy, o mañana como mucho, es más que suficiente. Cuando cualquier cosa puede ocurrir en cualquier momento. Sólo pensar en haber perdido tanto tiempo en chorradas del uno mismo me pone enferma.
Como me han dicho más de una vez, al final todo es prácticamente una cuestión de estómago, si te sienta bien... Perfecto, si te sienta mal, no se come más y punto.
Que empeño en ponerle nombre a todo, inmadurez, egocentrismo, crisis...
Yo le llamo apetito, por que si al final es una cuestión de estómago, será que lo primordial es tener hambre.
Pensadlo si queréis, pero no mucho
Se despide con un saludo in cordial
BM
Pd. Bon apetit
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No deja de sorprenderme como una persona se puede identificar tanto con lo que escribe otra En el fondo puede que no tenga nada que ver, pero yo, he notado eso.
ResponderEliminarGracias, Visitare de vez en cuando